Hoy quiero decir que dejar de lado el dolor es mi nuevo dogma, evitar el drama a punta de pluma y palabras.
Hoy quiero decir que siento un nudo en la garganta, que es el síntoma que sintonza el sintagma y que suaviza el surco que tiene mi alma.
La vida deja marcas.
Si no vives estás limpia, pero no hay historias contadas.
Y aunque ahora una lágrima rompa el silencio y el horizonte todavía se vea pequeño, has marcado el paso. Has cuidado cada átomo de cuerpo.
Hoy te quiero decir que cada paso que das cuenta. Que no importa si el primero cuesta. El segundo vendrá solo, eso es la inercia.
Hoy el silencio me invade, llena mi piel de segundos que no caben en un corazón vivo. Un corazón que se mantiene en pie porque late y late porque es mío.
Quizá sea lo único tan mío como el brío que le pongo a los besos que doy cuando no respondo de mi misma. Y desde este prisma, hoy quiero decir que A LA MIERDA LOS DOGMAS.
El dolor me mantiene viva.
Que si duele es que fue y si fue es que fui y si fui es que sigo amando la vida y a ti. A ti, artífice de palabras que brotan cuando el mundo explota. A ti, hoy te quiero decir que despliegues tus alas y vueles.
Que la vida es eso que pasa mientras
todo
pasa.
Con cicatrices, con heridas y sin palabras.